Sólo espera un rato,
hazme ese favor,
no te marches aún.
Sabes, es muy tarde,
quédate a dormir,
como siempre… hasta hoy.
No me dejes enfermo de ansiedad,
no te escondas de un ciego en la obscuridad.
No le huyas a las noches sin aurora,
no te alejes porque el frío me devora.
Habla, dime algo,
cuenta qué pasó
o cuándo ocurrió… la razón.
Comentarios
Deja tu comentario: